Sello HR4RS
Raúl García Hémonnet
La pandemia generada por la COVID-19 ha obligado a todas las escuelas y facultades a adaptarse e integrar nuevas maneras de transmitir el conocimiento y practicar la docencia. La Ingeniería Química y sus titulaciones asociadas, con gran carácter experimental, tampoco han salido indemnes de esta transformación metodológica.
Docentes de la ESCET han organizado recientemente la ‘I Jornada de Innovación Docente en Ingeniería Química’, que ha servido para dar a conocer aquellas metodologías y herramientas utilizadas por los docentes del área para hacer atractivo el estudio, aún estando fuera de la Escuela y disponiendo de manera limitada de los laboratorios.
“La jornada ha resultado muy satisfactoria, ya que hemos contado con más de 60 participantes y con gente de universidades como la UCM, UAM, o Universidad de Vigo, entre otras”, explica el profesor de Tecnología Química y Ambiental y miembro del ‘Grupo de Innovación Docente para el desarrollo y aplicación de herramientas de SIMulación en Ingeniería de Procesos’, Raúl Molina, organizador del evento.
Entre otras se han visto herramientas para generar ejercicios personalizados en un caso práctico, que permiten la generación del caso y comprobar que las soluciones son correctas y también generar plantilla de corrección rápida. Así mismo, como útiles de apoyo a la docencia se han utilizado programas de cálculos matemáticos, que, por ejemplo, permitían desarrollar casos de termodinámica. Cambiando dos o tres variables se obtenía un caso concreto. “El denominador común era que fuera atractivo para el alumno. Con interfaz gráfica amable e intuitiva, más visual”.
Vivir el laboratorio, sin estar en él
Uno de los desafíos más importantes que han vivido las titulaciones con alto grado de experimentalidad ha sido poder replicar las prácticas de laboratorio cuando el uso de estas instalaciones ha estado muy restringido debido a la situación sanitaria.
En este sentido, explica Raúl Molina, “hemos utilizado y generado videos de manejo de instalaciones, simulación de prácticas o guiones interactivos de prácticas, con enlaces de interés, vídeos, infografías, de las que hemos hablado en las jornadas”. Además, se han empleado métodos de autoevaluación online y aplicaciones, por ejemplo en una asignatura, como un libro online que los estudiantes han podido consultar, yendo a los temas que más les interesaban en cada momento”.
El uso de este tipo de herramientas y metodologías ha sido muy valorado por los estudiantes en las encuestas docentes. Raúl Molina deja claro que este conjunto de útiles “constituyen apoyos a la labor docente y en ningún caso la sustituyen”, la ‘I Jornada de Innovación Docente en Ingeniería Química’ ha servido para poner en valor todo el esfuerzo de profesores y profesoras a la hora de intentar hacer del proceso de aprendizaje algo más motivador en un momento en el que los estudiantes habían perdido su contexto habitual de trabajo, al estar confinados en casa