Sello HR4RS
Raúl García Hémonnet
La Universidad Saludable cierra el presente curso con un éxito total de participación en sus actividades. Ha duplicado la afluencia a sus programas (real y virtual) llegando a las 5.542 personas.
Conseguirlo no ha sido fácil. Sus responsables, las psicólogas Ainhoa Romero y Silvia Cruz señalan que la pandemia ha obligado “cambiar las iniciativas a formato online. Por suerte hemos contado con la ayuda del Centro de Innovación en Educación Digital (CIED), y los servicios de audiovisuales y TIC. Gracias a ello empezamos a funcionar de forma online a partir de octubre con todas las actividades que pudimos y hemos creado muchas actividades nuevas”.
Herramientas para afrontar una pandemia
Las iniciativas han estado principalmente centradas en salud y recursos centrados en aquellas competencias que desde el servicio han valorado como más importantes en el escenario creado por la COVID-19: muchos cambios, retos que afrontar tanto para los estudiantes como para los PDI y PAS, teletrabajo, teleestudio, mayor uso de las tecnologías. Así, ‘Regulación emocional’, ‘Potenciar cambios saludables’, ‘Mindfulness’, ‘Relaciones Interpersonales y Habilidades Sociales’, ‘Técnicas de estudio’, ‘Relaciones de pareja saludables’, ‘Prevención de adicciones tecnológicas’ , ‘Perfeccionismo’ o ‘Herramientas para la resiliencia personal’ han sido algunas de las temáticas más trabajadas. Por estas formaciones han pasado casi 3.300 estudiantes.
El balance no puede ser mejor, explican Ainhoa y Silvia, “el nivel de satisfacción de los participantes es de 9’5 sobre 10 según las respuestas de las encuestas de valoración que pasamos en cada actividad”. En general, en la mayoría de los seminarios, se registraron datos de participación de 300 personas. Las plazas, señalan “se agotaron en pocas horas”.
Modelo híbrido y más actividades para PDI y PAS
De cara al curso 2021/2022, desde la Universidad Saludable quieren seguir proponiendo iniciativas, talleres, jornadas y seminarios que permitan a los usuarios y usuarias “conectar con sus sentimientos”, indican sus responsables.
En este sentido, tienen previsto “combinar lo presencial con lo online para diversificar la oferta aprovechando las posibilidades que nos ofrece la tecnología. Por ejemplo, nos permite llegar a campus más lejanos, como el de Aranjuez”, indica Silvia Cruz.
Ainhoa Romero, por su parte señala que la principal línea de actuación va a seguir siendo “trabajar en lo relacionado con las competencias emocionales, pero también en otros hábitos saludables, reforzar la atención individualizadas e incrementar las actividades destinadas a PDI y PAS. Vamos a poner un foco especial en actividad física y alimentación”.
Además, al pertenecer al vicerrectorado de Planificación y Estrategia “estamos totalmente comprometidas con plan estratégico URJC 2030. Nosotras trabajamos esencialmente lo que tiene que ver con el ODS (Objetivo de Desarrollo Sostenible) 3 pero también contribuimos a que los ODS sean más conocidos por la comunidad universitaria y sus integrantes se involucren con esta iniciativa”, afirman. Y añaden que, todo ello “estando, como siempre, abiertas a escuchar las demandas de la comunidad para ir configurando las actividades.
Una nueva realidad
El ritmo de vacunación, la bajada de la incidencia y la disminución de las restricciones nos sitúan ante una nueva realidad en la que vemos la luz al final del túnel de la pandemia de la COVID-19. Ante esta situación les importante prepararse desde el punto de vista psicológico. Según señala Silvia Cruz, “ahora va a haber varios retos. Volver a una cierta normalidad va a costar por miedos que han quedado a alguna gente. Otros se van a pasar de frenada. Tenemos que ir siendo conscientes de que las cosas están cambiando, con prudencia. A nivel emocional, si algo se atasca hay que pedir ayuda. Es importante estar en conexión contigo y con tus emociones e ir identificando lo que se vaya sintiendo”. Ainhoa Romero añade, “son periodos de cambio hay incertidumbre y frustración. Hay que intentar saber manejar las emociones”.
Para ello, una buena alternativa es acercarse al abanico de actividades que la Universidad Saludable propone a la Comunidad Universitaria de la Universidad Rey Juan Carlos para mejorar el bienestar, en sentido amplio del término, de sus integrantes.