Sello HR4RS
Rosa Márquez
En 2017, el estadounidense Richard H. Thaler recibió el Premio Nobel de Economía por su contribución al desarrollo de la economía conductual, un nuevo campo de estudio que investiga cómo afecta la psicología a las finanzas. Según esta disciplina, los seres humanos no siempre actúan de manera tan racional y práctica como sugiere la teoría económica clásica, sino que sus decisiones se ven afectadas por sesgos como el de confirmación, la tendencia a buscar y dar más peso a la información que confirma sus creencias, o el de inmediatez, preferir las recompensas inmediatas a las futuras.
El curso de verano ‘¿Somos racionales? Líderes en propuestas conductuales y felicidad corporativa’ se adentra en esta nueva disciplina que aún no se imparte en la universidad, por ser un área de conocimiento muy reciente, pero que ya tiene aplicaciones en numerosos campos como las política públicas, donde se utiliza para promover elecciones más deseables, como ahorrar para la jubilación o elegir estilos de vida más sanos. Durante el curso también se abordan temas como la trampa de la pobreza o el tecnoestrés, un término que se emplea para describir la ansiedad que sufren las personas con dificultades para adaptarse a las nuevas tecnologías.
El curso se ha impartido este martes en el campus de Madrid-Vicálvaro “y ha estado abierto a todo el mundo, pero tiene especial interés para los estudiantes universitarios que quieran formarse en esta disciplina, ya que las empresas están demandando cada vez más especialistas”, explica Ana María Moreno, profesora del departamento de Economía Financiera y Contabilidad de la URJC y codirectora del curso. Junto con los seminarios, hay talleres de juegos conductuales, para aprender de forma práctica dentro del aula, y el curso cuenta con la participación de representantes de Mapfre, Beway o Auren para dar a conocer los programas conductuales y de felicidad corporativa implementados por estas empresas.