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Mentoría para la investigación Euriclea
Nora Fernández Fernández
La semana pasada, varios alumnos y alumnas de la rama de Biología y Ciencias Ambientales de la ESCET plantaron más de 80 especies de matorral mediterráneo y de zonas de yesos en el campus de Móstoles, creando el Jardín Mediterráneo de la URJC.
Esta actividad se genera dentro de un proyecto de innovación docente llamado GIMAsBIO y en ella participan varios investigadores del área de biodiversidad y la Oficina Verde. El proyecto de innovación recoge otras 10 iniciativas, todas ellas en línea con el trabajo de la Oficina Verde de fomentar la biodiversidad en los campus según cuenta su coordinadora, Consuelo Iriarte.
El objetivo de esta iniciativa es “montar un observatorio de biodiversidad, una infraestructura de aprendizaje e investigación, y hacerlo con los estudiantes de varias titulaciones de la ESCET para aprender mediante metodologías activas de aprendizaje”, comenta Iriarte.
En el jardín botánico recién plantado se han reproducido dos ecosistemas: uno de matorral mediterráneo y otro de material de yesos. Las profesoras Isabel Martínez y Ana Sánchez son las principales impulsoras de la iniciativa, a través de la asignatura Ecosistemas Ibéricos del grado de Biología.
“Ellas propusieron en el aula que el estudiantado generase la información para crear el jardín y que diseñasen el proyecto para poder recrear estos ecosistemas; elegir las especies, su distribución en este espacio y el nivel de presencia”, señala Iriarte.
Este proyecto ha podido llevarse a cabo gracias a los esfuerzos coordinados del Grupo GIMAsBIO, Oficina Verde, Servicio de mantenimiento, Oficina Técnica, Gerencia de Campus y y laboratorio CULTIVE, “además de la colaboración de iMIDRA, un organismo de la Comunidad de Madrid, que nos ha regalado plantas autóctonas para que las especies sean realmente de donde tienen que ser”, añade la directora de la Oficina Verde.
En la plantación también han estado presentes alumnos del proyecto de Universidad Inclusiva, un título propio de expertos en soluciones verdes urbanas, que la URJC tiene en marcha junto con la Fundación Juan XXIII.
Tal y como ha señalado la coordinadora de Oficina Verde, “esta es la primera piedra de un proyecto que queremos ver crecer. De momento hemos generado el espacio y le vamos a dar visibilidad para involucrar a más estudiantes”. El recurso, creado por y para los alumnos, “pretende sensibilizar de la importancia de la Biodiversidad tanto a la comunidad universitaria, como a la ciudadanía”.
