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Jueves 13 de Junio de 2019 a las 11:10

El profesor Jesús Porres dirige la restauración del cuadro de La Anunciación en Sevilla

Esta pintura del siglo XVIII se encuentra en la parroquia de San Bernardo en Sevilla, y desde 1936 se encontraba afectada por su pésimo estado de conservación, con mucha suciedad y repintes, además de haber sufrido varios cortes y daños de mucha gravedad en la tela.

Alberto Sánchez Lozano

La Iglesia de San Bernardo de Sevilla es uno de esos pequeños centros de arte que se encuentran en ciudades con historia como la hispalense. Edificada a finales del siglo XVIII, entre 1780 y 1785 por José Álvarez, se inauguró en 1786 y tiene el nombre del barrio sevillano en el que se encuentra, dentro del distrito de Nervión. Catalogada en 1992 dentro del Patrimonio Andaluz, en su interior guarda numerosas pinturas y esculturas del barroco y el neoclásico.

Una de las pinturas del segundo cuarto del siglo XVIII que se encuentran en esta parroquia sevillana ha necesitado de 8 meses de restauración para ofrecer un aspecto renovado y reluciente. El cuadro de La Anunciación, de autor desconocido y estilo neoclásico, sufrió graves daños a causa de la Guerra Civil, cuando ya se encontraba en un pésimo estado de conservación por la suciedad, los repintes sobre el cuadro original y una serie de cortes que dañaron la tela de la pintura y "la convirtieron en un puzzle", según afirman sus restauradores.

El profesor de la URJC Jesús Porres Benavides, junto a la también restauradora de arte Ana Álvarez Morgado, ha dirigido los trabajos de restauración de esta obra neoclásica. En la restauración se ha llevado a cabo una fijación de los estratos, así como un reentelado a la manera tradicional, una limpieza de barnices y suciedades y una reintegración volumétrica de tejido y estucos. Por último, se procedió a la reintegración cromática. La restauración ha tenido un presupuesto de 3.100 euros.

Esta obra está insertada en un retablo barroco del siglo XVIII, con dos santos jesuitas (San Ignacio y San Francisco Javier) flanqueando la imagen principal de La Anunciación, además de otro relieve en el ático en el que se encuentran representados San Benito, San Bernardo y Santo Domingo.

Francisco Herrera cree que la fecha de esta pintura es del segundo cuarto del siglo XVIII, del que se desconoce el autor. Herrera dice del cuadro que “que es producto de la seriación que experimenta el retablo dieciochesco, especialmente el de pequeñas proporciones como es este caso. El de ‘La Anunciación’ está mejor resuelto, presenta estípites a los lados, entrecalles sesgadas y en el centro un marco con el lienzo de la Anunciación. Rematado por un medio punto”.

Este retablo sufrió importantes daños en 1936. La imagen principal quedó muy dañada, además de perderse una urna con la figura yacente de la Virgen del Tránsito en el altar del retablo. También sufrieron daños cuantiosos y grandes pérdidas en la Hermandad Sacramental. La imagen de la Inmaculada Concepción, situada en la Capilla Sacramental del Sagrario, junto a otras obras de arte fueron seriamente dañadas.