Sello HR4RS
Irene Vega
Una de las demandas más frecuentes del profesorado que trabaja con estudiantes con este diagnóstico gira en torno a la necesidad de una formación específica que facilite el manejo de sus diferentes alteraciones sensoriales. La actividad “Aulas sensorialmente inteligentes para mejorar la participación de los niños con Trastorno del Espectro Autista (TEA)” llevará a cabo distintos talleres para desarrollar, de manera coordinada con los docentes, estrategias para adaptar los entornos escolares del alumnado con diagnóstico de TEA en función de sus características y necesidades sensoriales. “Los profesores valoran muy positivamente este tipo de formaciones, ya que todas las iniciativas que promuevan la relación y la coordinación entre las dos áreas tienen un valor añadido. Este es el motivo por lo que la organización de estos cursos de divulgación científica se lleva a cabo entre profesionales del ámbito sanitario y de la educación”, señala Cristina Gómez, profesora e investigadora del área de Terapia Ocupacional de la URJC y coordinadora de la actividad. Entre los objetivos de este programa, destaca el aprendizaje de diferentes estrategias para facilitar la regulación de la conducta y el nivel de alerta.
Las primeras sesiones se realizarán los días 2 y 16 de diciembre de 2020, con una duración de 2 horas cada día, y se desarrollarán más talleres durante todo el curso académico. La acogida por parte del profesorado interesado ha resultado muy positiva. “Recibimos más de 1000 inscripciones en un solo día, lo que muestra el interés que tiene el profesorado en este tipo de formaciones. Las plazas están limitadas a 245 personas por sesión. Los profesores que se han inscrito proceden de todo el territorio nacional”, subraya la profesora de la URJC.
Los talleres serán impartidos por Beatriz Matesanz García, terapeuta ocupacional por la UNED y diplomada en Magisterio de Educación Infantil por la Universidad Complutense de Madrid, doctora en Terapia Ocupacional y máster universitario en Patología Neurológica por la Universidad Rey Juan Carlos. “La docente está especializada en la valoración e intervención del niño o niña con diagnóstico de TEA. Además, es maestra en educación infantil lo que permite adaptar los conocimientos propios del área sanitaria en el entorno escolar”, apunta Cristina Gómez Calero.
Esta actividad forma parte del programa de la Unidad de Cultura Científica y de la Innovación (UCC+i), dependiente del Vicerrectorado de Investigación, y cuenta con la colaboración de la Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología (FECYT) y el Ministerio de Ciencia e Innovación.