Es parte del proyecto Waterspoutt, que desarrolla procesos de desinfección solar de agua para permitir abastecimiento de calidad en comunidades rurales remotas.

En esta fase, están comprobando el buen uso de los contenedores plásticos que, al ser transparentes a la radiación UV, inactivan a los posibles patógenos del agua. Tales contenedores han sido desarrollados buscando su máxima estabilidad a largo plazo y, así, evitar posibles problemas químicos y toxicológicos tras su uso prolongado.

Ya en las instalaciones de la URJC, están trabajando en el desarrollo de un modelo matemático predictivo para el cálculo del tiempo óptimo de exposición de los reactores solares al sol para que alcancen sus objetivos. Parte de los resultados han sido publicados recientemente en la revista Chemical Engineering Journal.

La dirección de comunicación de nuestra universidad ha redactado una nota más completa.