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Martes 27 de Julio de 2021 a las 06:30

Un robot inteligente para ayudar a menores con TDAH

La URJC participa en el desarrollo e implementación del robot Atent@s, un asistente inteligente capaz de monitorizar la actividad de los niños con el trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH) y de ayudarles a evitar las distracciones en la realización de sus tareas cotidianas como los deberes, contribuyendo así a un mejor rendimiento escolar.

Abel Verard

El TDAH es una afección crónica que afecta a millones de menores que, a menudo, se mantiene en la edad adulta. Incluye una combinación de problemas persistentes, tales como dificultad para mantener la atención, hiperactividad y comportamiento impulsivo. Su sintomatología puede hacer que, para los niños que lo padecen, tenga una complicación adicional la realización de actividades cotidianas, como mantener la atención en clase de forma exitosa.

Para evitar las complicaciones que se presentan en el día a día de estos menores, un equipo formado por la UPM y la URJC, ha desarrollado el asistente robótico Atent@s, que les ayuda a ser más independientes en la realización de sus tareas escolares. El robot incide en sus dificultades, contribuyendo a la mejoría clínica y al bienestar del menor y de su familia. Los resultados del estudio han sido positivos. Según explica Nuria Máximo, investigadora del proyecto y profesora de Terapia Ocupacional de la URJC, gracias al empleo del robot en la realización de tareas, a partir de la tercera semana “se reduce la aparición de parámetros asociados al TDAH en niños con y sin sospecha de este trastorno”.

El asistente virtual consta de una serie de objetos inteligentes que se acoplan al mobiliario cotidiano, como un escritorio o la silla, y que permiten monitorizar el comportamiento de los menores con TDAH durante una actividad de la vida cotidiana de cualquier niño. Estos objetos se conectan a un robot que recopila y analiza sus distintas acciones, para después interactuar con él en función de las pautas de interés establecidas por los terapeutas dentro de la actividad que se esté considerando. Asimismo, la información se almacena en un “repositorio” de seguimiento que está disponible para las personas involucradas en la vida diaria del menor, como sus familiares, terapeutas o profesores.

En cualquier caso, los objetos integrados son invisibles para el niño, que únicamente tiene al asistente robótico como elemento de interacción. Un robot que establecerá un diálogo limitado con el menor, orientado a realizar pequeñas intervenciones en su estado para que pueda volver a focalizarse en la actividad que estaba realizando.

El estudio tiene un impacto positivo en menores con y sin TDAH

Este asistente robótico, destinado a proporcionar apoyo terapéutico en la realización de tareas escolares por parte de menores con TDAH, se trata de una evolución de una versión anterior. Todas las mejoras que presenta se han realizado de acuerdo con los conocimientos adquiridos, así como la retroalimentación proporcionada por terapeutas, padres y niños. “Esta versión del asistente robótico busca optimizar la funcionalidad y los aspectos físicos del diseño anterior. Además, pretende aumentar la eficiencia del robot respecto a su predecesor en términos técnicos y funcionales. Para esta segunda versión se han realizado varias mejoras en los “aspectos electrónicos, en el diseño del montaje y en los algoritmos de programación”, señala Santiago Berrezueta, investigador de la UPM.

El estudio, cuyos resultados ya han sido publicados, ha tratado de probar la viabilidad de esta segunda versión del asistente robótico trabajando con niños fuera del laboratorio. Se trata de una experimentación centrada en el escenario académico. El proceso de experimentación se llevó a cabo con menores que, debido a la pandemia de COVID-19, están recibiendo el acompañamiento de un educador experto en un lugar improvisado de apoyo a las tareas dentro de una empresa. “Aquí los hijos de los trabajadores de la empresa pueden asistir a clases online mientras sus padres trabajan, haciendo también sus deberes por la tarde”, destaca la investigadora de la URJC. “Mientras resuelven los deberes, una educadora experta con experiencia en la educación de niños con capacidades especiales ofrece apoyo y ayuda a los menores si lo necesitan. Hasta el momento del experimento, la educadora ha estado trabajando con estos niños durante varios meses, conociendo sus rutinas y su comportamiento típico”, añade.

Una vez analizados los parámetros individuales, se observó que el nivel de distracción de los niños con sospecha de TDAH era mayor que el de aquéllos sin sospecha de este trastorno. No obstante, el resultado general es esperanzador. Tal y como apunta la profesora Nuria Máximo: “hay que seguir evolucionando la tecnología y sumarle otros objetos inteligentes. Lo importante es que, gracias al uso del robot, el niño aprenda a planificar la tarea, iniciar, mantener y finalizar la actividad”.

grafico TDAH

Por el momento, la aplicación de este asistente se ha centrado en tareas escolares, pero el equipo de investigación también espera poder hacerlo en otras actividades de la vida diaria de los menores.