• 1
Miércoles 12 de Julio de 2017 a las 12:46

Un alumno realiza prótesis de manos por impresión 3D con el apoyo de la URJC

Guillermo Martínez viajará la próxima semana a Kenia para acercar a las personas de escasos recursos la posibilidad de contar con una prótesis sin ningún coste.

El estudiante de la Universidad Rey Juan Carlos ha diseñado manos y brazos protésicos realizados por impresión 3D a partir del diseño de mano prensil del proyecto e-nable, realizado por la asociación de voluntarios Enabling the Future, que ofrece la posibilidad de fabricar manos artificiales por menos de 50 dólares. Sobre este diseño, Guillermo Martínez, alumno de último curso de Ingeniería en Organización Industrial, ha creado un brazo innovador con articulación de hombro para enviar a la región de Kabarnet, Kenia. El propio estudiante de la URJC ha costeado el viaje y se ha puesto en contacto con la ONG Bamba Kenya con el propósito de acercar a las personas de escasos recursos la posibilidad de contar con una prótesis sin ningún coste. “Estoy convencido que va a ser una experiencia única debido no solo al contraste cultural, sino también por la satisfacción de ofrecer algo de manera personal a las personas de esta región, que seguramente de otra forma no hubiesen podido acceder a este tipo de ayudas”, expresa Guillermo Martínez.

Actualmente Guillermo Martínez está ultimando tres prótesis de mano prensil (dos de antebrazo y otra de brazo completo) y varios repuestos para cubrir la primera ronda de demanda. Dichas prótesis mecánicas funcionan gracias al giro de las articulaciones, ya sea de muñeca o codo, y tras el nuevo diseño, también de hombro. “En el momento del movimiento, todos los dedos se cierran pudiendo agarrar o sujetar objetos y facilitar la vida cotidiana a la persona”, explica Guillermo. Además, para su fabricación ha utilizado la técnica de ensamblado con termoconformado, consistente en una operación secundaria tras la impresión 3D de cada pieza. “Para reducir tiempos de impresión, se imprimen las piezas más grandes sin apenas altura, la cual no es su forma final, y a continuación se someten dichas piezas a altas temperaturas, ya sea por aire caliente o con agua entre 80-100 ºC. Esto supone que la pieza sea moldeable para conformarla de manera manual hasta conseguir su forma final, pudiéndose así ensamblar todas las piezas que componen la prótesis”, añade.

Este proyecto lo ha realizado junto con el área de Tecnología Electrónica de la URJC, que le ha proporcionado los recursos y consumibles para su desarrollo y donde también ha estado realizando su Trabajo Fin de Grado. Además, esta iniciativa supondrá el comienzo de una posible colaboración estable con asociaciones de Kenia y otros países en vías de desarrollo. Esta experiencia también le ha proporcionado a Guillermo mayores competencias en su titulación. “He conseguido conocimientos avanzados en diseño e impresión 3D, ya que he tenido que diseñar un par de prótesis personalizadas desde cero. Me he esforzado al máximo y esta oportunidad va a suponer un gran plus en mis competencias profesionales”, destaca el alumno de la URJC.