• 1
Viernes 16 de Octubre de 2015 a las 11:35

El ministro de Defensa inauguró el VIII seminario URJC-CESEDEN con una conferencia donde alertó sobre la necesidad de apostar por la seguridad preventiva ante los crecientes e imprevisibles riesgos

El ministro de Defensa, Pedro Morenés,  pronunció la conferencia inaugural de   la VIII edición del seminario permanente “Profesor Eduardo García Poblete”, que anualmente  organiza la Universidad Rey Juan Carlos en colaboración con el Centro Superior de Estudios de la Defensa Nacional (CESEDEN).  El acto se desarrolló  en la Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales y contó con la asistencia en la mesa presidencial  del rector, Fernando Suárez, la decana Pilar Laguna y el general Miguel A. Ballesteros, director del Instituto de Estudios Estratégicos del CESEDEN.

El contenido del seminario, que se prolongará a lo largo del presente curso, versa sobre “Paz, seguridad y defensa en un entorno de cambios acelerados” y será impartido por profesores de la URJC y del CESEDEN, así como por miembros de las Fuerzas Armadas y de los Cuerpos de Seguridad del Estado, diplomáticos,  periodistas y representantes de otros organismos e instituciones como la fundación COTEC y la Asociación Española de Empresas Tecnológicas de Defensa.

Tras unas breves palabras de bienvenida y salutación por parte del rector, intervino el ministro de Defensa, Sr. Morenés, pronunció un discurso donde aludió a la necesidad de que la sociedad y los ciudadanos sean conscientes de la importancia que tienen las políticas de seguridad preventiva en un mundo  lleno de riesgos e incertidumbres. Morenés advirtió que el concepto del “final de la historia”, enunciado por el ensayista Francis Fukuyama en 1992,  se ha demostrado como falso. Bien al  contrario, tras el desmoronamiento del bloque soviético y del status quo de la Guerra Fría los riesgos internacionales se han acrecentado considerablemente, sumándose a los escenarios tradicionales de tensión que ya existían.

En consecuencia, señaló el ministro de Defensa, es fundamental que la sociedad sea consciente de que las inversiones y las contribuciones a la seguridad nacional e internacional son condición indispensable para garantizar la libertad y la estabilidad de las sociedades democráticas y contribuir a la existencia de un mundo más seguro.